Día Mundial de los Derechos Humanos: su historia y vinculación con la seguridad alimentaria y nutricional
El 10 de diciembre, en 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, razón por la cual los Estados adoptaron ese día cada año como el Día Mundial de los Derechos Humanos. De esta manera, en el texto se proclamó como un ‘ideal común por el que todos los pueblos y todas las naciones deben esforzarse por medidas progresivas de carácter nacional e internacional, para asegurar su reconocimiento y aplicación universales y efectivos’.
El Derecho a la Alimentación, un derecho para todos
El derecho a la alimentación es un derecho humano reconocido por las normas internacionales. La Declaración Universal de Derechos Humanos reconoce que toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación (art. 25).
El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, que forma parte de la Carta Internacional de Derechos Humanos, reconoce el derecho de toda persona a un nivel de vida adecuado (art. 11.1). Reconoce además expresamente “el derecho fundamental de toda persona a estar protegida contra el hambre” (art. 11.2).
Frentes Parlamentarios contra el Hambre y el Observatorio del Derecho a la Alimentación: ejemplos del compromiso en la región
América Latina y el Caribe aún cuenta con más de 34 millones de personas subalimentadas y la malnutrición cada día se extiende con más fuerza en su territorio. Revertir el panorama supone un gran esfuerzo y desafío de carácter multisectorial, incluyendo las distintas esferas sociales.
En el marco de la Iniciativa América Latina y el Caribe sin Hambre, los Frentes Parlamentarios contra el Hambre y el Observatorio del Derecho a la Alimentación, son muestra del compromiso colaborativo por parte de académicos y parlamentarios para identificar y apoyar a la formulación de políticas públicas y legislación que combatan tanto la malnutrición como el hambre y que garanticen la salud de los individuos, fortaleciendo los esfuerzos ya en camino en la región para erradicar el hambre, la inseguridad alimentaria y la malnutrición en una sola generación.